"Por fin llega el Tour que levanta de la siesta a los españoles (periféricos, centrales izquierdos, medios y laterales derechos). Tourmalet y Luz Ardiden son nombres (sobre todo este último) que suenan en la mente colectiva del ciclismo español. Que la etapa coincida con la fiesta nacional francesa es más que una buena noticia. En teoría los franceses saldrán calientes de salida. Así pues, lo más lógico sería que los equipos franceses intentaran meter por todos los medios a su gente en la escapada buena. Cofidis, AG2R, la Frace des Jeux... que todavía están a pelo, querrán meter a sus chicos por las rampas del Pirineo, que amenaza lluvia y épica. Los Astaná están sin jefes y Di Gregorio tiene ganas, seguro. Por no hablar de los Radioshack. ¿Qué hará Zubeldia y compañía ahora que no estarán muy marcados y las caídas han diezmado al superequipo?.No nos podemos olvidar que la marea naranja poblará, como siempre, los Pirineos. Son también las montañas del Euskatel, y pelearán. ¿Quién asumirá el mando de la etapa?. Está claro que Europcar no se tiene que meter en demasiadas milongas, y Voeckler, valiente entre los valientes, aguantará como un jabato mientras pueda. Quién sabe, igual si no hay guerra en Tourmalet es capaz de aguantar en Luz Ardiden. Todo se verá. Demasiadas esperanzas en la primera etapa de Pirineos. Tanto marcaje y tanto ciclismo moderno puede provocar que los segundos de a bordo aprovechen las estrategias de Leopards y comañías para armarla en el penúltimo puerto. Incluso antes. Tengo claro que Gilbert morirá matando. Y... ¿Qué me dicen de Urán?. Por ahí anda Samu también que tendrá ganas y poco que perder. Al asturiano le pasa como a Escartín, que no tiene tirón suficiente en la montaña pero es demasiado bueno para dejarlo marchar. Los grandes mandarán a su gente de salida. Se supone que BMCs, Saxos, incluso Rabobanks, tendrán que meter gente de enlace, por si las moscas. Aunque en cuanto empiece Tourmalet la batalla es clara y hay poco llano para meterse en pactos modernos y otras gilipolleces. No estaría de más que Rojas pudiera recoger algunos puntos en el sprint intermedio metiéndose en un corte. El maillot verde cada día es más caro, pero Le Tour no es sólo general y montaña. Bravo por el murciano. Si tuviera que apostar con el corazón, metería en mi porra a Contador (Cuenta, cuenta Contador) lanzando un ataque con un par, desde lejos, a lo Ocaña, desde la montaña sagrada pirenaica. Pero todo dependerá de la rodilla y de cómo afrontan los demás sus propias guerras. Evans tendrá un día malo, lo sabe hasta él, pero tiene clase de sobra y si los hermanísimos quieren joderlo tendrán que mover ellos la carrera, que para eso tienen el mejor equipo. Cancellara solico, tirando desde salida, podría hacer el corte bueno sin necesidad de puertos ni de repechos. Hoy, los ciclistas de sofá, tan impacientes y forofos, quieren épica. Aunque la épica es constante en el espectáculo más grande del mundo. ¿Y si el tapadillo es Frank? Se verá. Por gustarme me gustaría ver a Sastre por los Pirineos o a Txurruka dando leña como siempre, pero ese gozo ya me lo han quitao hace días. Mañana acudiré con mi padre a disfrutar de una etapa. De paso me subiré el Aubisque y esperaré que para la etapa que nadie espera nada se monte una marimorena. Hoy Contador recortará tiempo. ¿El amarillo?. El amarillo será canguro, o será español."
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