viernes, 19 de abril de 2013

Desde el Gavia s01e04: Abril



Miguel Poblet se marchó hace unos días. En la España de la posguerra, con sus carreteras herrumbrosas y llenas de baches, Poblet decide escapar de las carreras de provincias y marchar a Italia...gana dos veces la Milán-San Remo, es capaz de vencer en la misma temporada en las tres grandes rondas por etapas e hizo lo imposible, una vez retirado, por mejorar el ciclismo en España: convence a Jaques Anquetil para que corra la Volta a Cataluña, que con él comienza su despegue internacional. Poblet, elegante, visionario, sin más estímulo que la luz de Fausto Coppi y antes del advenimiento de Merckx. Poblet el que buscó la gloria en la rabia del repecho y del último suspiro.Descanse en paz.

Previo a la Lieja Bastoña Lieja y repaso de las Ardenas junto a Jorge Tabuenca

Descargar aquí



  




La Milán-San Remo de este año vio su recorrido recortado en una buena cantidad de kilómetros. Las malas condiciones meterológicas hicieron inviable ascender el Paso Turchino y la carrera tuvo que ser neutralizada y variándose el recorrido inicial dejó a los corredores a 85 kilómetros de meta. El Poggio, en esta ocasión, no fue juez único, pero tras un ataque de Philippe Gilbert en su descenso dejó a la entrada de San Remo a un grupo de siete corredores entre los que destacaba un muy activo Sylvan Chavannel (que unas semanas más tarde se llevaría el triunfo en los Tres días de La Panne) y sobre todo Fabian Cancellara y Peter Sagan. El suizo cumplió su promesa de no dar un solo relevo al joven eslovaco, que pagó el esfuerzo de controlar el final de la carrera y se vio superado en el sprint por el velocista alemán Gerald Ciolek en un resultado que puede ser calificado de auténtica sorpresa.  




Las dos grandes vueltas por etapas que se corren en territorio español tuvieron ganadores con un punto de sorpresa: del 18 al 24 de marzo se celebró la Volta a Cataluña con victoria final de Daniel Martin. En la primera etapa el descenso de un puerto de segunda sirvió para dejar por delante a una veintena de corredores con unos pocos segundos de ventaja, lo que reducía el abanico de candidatos. Los Sky, que habían provocado el corte del primer día, se vieron superados en la tercera jornada por los Movistar, que vieron cómo Nairo Quintana se imponía en la meta de Vallter 2000, con Alejandro Valverde segundo y nuevo líder por delante de Bradley Wiggins y Purito Rodríguez. Pero en la siguiente etapa, la reina de esta edición, la carrera saltó por los aires: una caida hacía que Alejandro Valverde se retirara vistiendo el maillot blanquiverde de líder y Daniel Martin, con una larguísima escapada se imponía en la cima del Puerto de Ainé. Purito Rodríguez, en su casa, se colocaba segundo, dispuesto a llevarse el triunfo en la última jornada, en la etapa de Barcelona. El recorrido recordaba aquel mítico mundial en Barcelona, con la victoria de Gimondi, pero la carrera estuvo muy controlada y aunque Purito lo intentó en el últimio paso por la montaña de Montjuic la victoria se quedó en las filas del Garmin-Cervelo. El último ganador del Tour de Francia, Bradely Wiggins, solamente pudo hacer cuarto.

  



La Vuelta al País Vasco vio la confirmación de uno de las más importantes promesas del ciclismo actual: el colombiano del Movistar Nairo Quintana. La pasada temporada avisó con sus victorias en la Vuelta a Murcia, en la Ruta del Sur o el Giro della Emilia, además de una etapa en el Dauphine Libere, pero esta temporada ha comenzado con mucha fuerza, llevándose la etapa reina en Cataluña y la Vuelta al País Vasco en una crono final absolutamente inmensa. Todas las etapas del País Vasco están diseñadas para que exista batalla: repechos, finales complicados, descensos agónicos...la primera etapa fue para Simon Gerrans, que sin alcanzar los niveles del año pasado, suma y sigue. En la segunda repite el Orica en Vitoria con Daryl Impey. El ciclista de Alhama de Aragón, Ángel Vicioso consiguió sendos terceros puestos en las dos primera etapas y rozó con los dedos el maillot de líder. Pero en la tercera etapa, la primera con final en alto, la victoria fue para el colombiano del Sky Sergio Henao, que se impuso en el final en La Lejana con una facilidad pasmosa. Nairo Quintana hacía cuarto y avisaba de su potencial, aunque la lucha parecía que se iba a centrar en el duelo entre Richi Porte y Alberto Contador. En el final de la cuarta jornada en Arrate las cosas comenzaro a verse más claras: Contador no iba y Nairo Quintana con un par de segundos se imponía quedando a seis segundos de líder. Parecía que la victoria se la llevaría el Sky Richi Porte, consiguiendo un doblete histórico de Paris-Niza y Vuelta al País Vaco en el mismo año y más después de ganar la última etapa en línea con un ataque en el último minuto, pero las cosas no fueron tan fáciles: en la crono final de 24km en Beasaín se lleva la victoria el especialista Toni Martin y un sorprendente Quintana segundo se lleva la general. El podium lo completan los dos Sky, Porte y Henao. Los Movistar, con Intxausti tercero en la crono y octavo en la general y Rui Costa ganador de la Klasika de Primavera unos días más tarde, llegan muy fuertes a las Ardenas.  


Y llegamos al pavé, al polvo, a las piedras: un primer plato apetitoso con la victoria de Fabian Cancellara en la E3-Prijs Harelbeke con una exhibición marca de la casa. Ataque a 35 kilómetros de meta y victoria en solitario. Segundo fue Peter Sagan que se recuperó moral y físicamente para imponerse dos días más tarde en la Gante-Webelgem, su primera gran victoria en clásicas. En esta ocasión Sagan decidió no esperar al sprint dentro del reducido grupito de escapados y lanzó un demoledor ataque a menos de 5 kilómetros para llegar en solitario a la meta. El domingo 31 de Marzo las espadas volvieron a izarse: la edición 97 del Tour de Flandes no defraudó y el duelo que se llevaba paladeando desde el comienzo de temporada volvió a producirse: Cancellara frente a Sagan, el viejo y el joven, la veteranía y la pujanza. No hubo color y el Paterberg fue el juez. A pesar de que Sagan resistió el primer envite de la locomotora helvética el arreón final de Espartaco, de Cancellar, fue sufiente para imponerse en solitario. Sagan, agónico, quiso demostrar su valía dando incluso varios relevos a Cancellara, pero la victoria en Flandes tendrá que esperar. Una semana más tarde se celebraba la Paris-Roubaix, el infierno del norte. Este año no hubo ni lluvia ni barro, aunque la carrerera, como no podía ser de otro modo, fue muy dura. Lo que parecía que iba a ser un paseo marcial de Cancellara ante la ausencia de Sagan y la caída de Tom Boonen en Flandes que lo dejaba fuera de la competición no fue ni mucho menos así. Las jóvenes promesas de la piedra y el pavé están llamando con fuerza a las puertas del velódromo de Roubaix y en el que parecía el ataque definitivo Cancellara no pudo despejarse de Step Vanmarcke del equipo Blanco. Los dos llegaron juntos al velódromo y allí el joven belga pagó con su inexperiencia, siendo derrotado por Cancellara, que obtenía así su tercera Paris Roubaix, cerrado su mes de marzo triunfal tras las victorias en Harelbeke y Flandes.